UNKNOWING

     La araña que crea su propia tela de araña,sabe perfectamente cada recoveco de su trampa, cada rincón oscuro. El insecto que cae en ella solo sabe que lo devoran,sin ni siquiera saber porqué.

Es justo lo que ocurre hoy en día  ,el drama que inunda informativos nacionales y oleadas de personas en llanto. Los tan horribles desahucios.

Pero somos tan insectos,tan vulnerables ante este entramado de arañas,que no sabemos ni lo que firmamos,ni por donde vienen los golpes.

Esa figura tan antigua,la hipoteca. Deberíamos conocerla antes de ejercitarla. Un ciudadano de a pie pierde su hogar,lo que es toda una vida de recuerdos y trabajo,pero eso sí,el banco no va a perder ni un solo euro inflacionista.

Para entendernos, podemos hipotecar nuestra casa con un valor x ,para poder avalar un crédito que la entidad bancaria nos concede.Pero claro, si ocurre una catástrofe inmobiliaria y los precios de los inmuebles caen en picado....nosotros hemos de hacer frente a la cantidad de crédito que se nos concedió y que desafortunadamente ya no cubre el valor de la vivienda.

Nuestro fantástico sistema jurídico crea dos herramientas a favor del acreedor ,el Banco : un acción real para poner en pública subasta nuestra casa y cobrarse lo que de ella se pueda obtener,y una acción personal que nos obliga a responder con nuestros bienes presentes y futuros de ese margen dinerario que ya no cubre el valor del inmueble. Y de ahí el drama, personas que no solo pierden su casa si no que además deben enredarse hasta el cuello en la tela de araña que ellas mismas han firmado.



                                                                                   En la dualidad , C by C

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